EEUU se recupera de la tormenta que causó 15 muertos

Partes del centro y sur de Estados Unidos se recuperaban ayer tras un fin de semana de tormentas, fuertes vientos, granizo y tornados aislados que causaron al menos 15 muertos, pero la amenaza de que siga el mal tiempo no ha desaparecido en el sur del país. El Servicio Nacional de Meteorología dijo que partes del noroeste de Florida, Alabama, Georgia y Mississippi podrían verse afectadas.

Los tornados azotaron varias poblaciones pequeñas del este de Texas y ocasionaron la muerte de cuatro personas. Cinco personas más fallecieron por inundaciones y fuertes vientos en Arkansas, entre ellas un jefe de bomberos que fue arrollado por un vehículo mientras trabajaba durante la tormenta. En Missouri se reportaron tres muertes, incluida la de una mujer que se ahogó después que la corriente arrastró su automóvil y un hombre de 78 años que salió de su casa a inspeccionar los daños y también fue arrastrado por la corriente.

Uno de los dos decesos registrados en Mississippi fue un niño de 7 años víctima de una descarga eléctrica y una niña de dos perdió la vida en Tennessee tras ser golpeada por el poste de una portería de fútbol arrancada por el viento.

Las tormentas azotaron Luisiana, Mississippi y Alabama el domingo cuando feroces vientos causaron daños en zonas aisladas.

En Durant, en el centro de Mississippi, una persona murió a causa de las tormentas, aunque el servicio de emergencia no dio detalles del hecho. La tarde del domingo la agencia reportó la muerte de un menor en el condado de Rankin, a unos 32 kilómetros (20 millas) al este de Jackson, debido a electrocución en medio de un río crecido. La policía dijo que el chico había desenchufado un carrito de golf eléctrico y que el cable había caído el agua.

Alexa Haik se fue a dormir el sábado a la noche pensando que solamente iba a llover, pero el domingo por la mañana se despertó con el chillido de las ambulancias y al encender la televisión se enteró de que se aproximaba un tornado. Se escondió en un pasillo con su familia y sus mascotas y se asombró luego al salir y ver la cantidad de árboles derribados en su vecindario en Clinton, Mississippi, a unos 32 kilómetros (20 millas) al oeste de Jackson.

Al salir más allá de su calle, se percató de que el daño fue verdaderamente limitado.

"Realmente pensé que más allá de nuestro vecindario habría daño también, pero parece que solo afectó nuestra zona", expresó Haik.

La zona del centro de Tennessee fue apabullada por una cadena de tormentas que derribó árboles y cables de electricidad el domingo.